Los sucesos de Tunez, Egipto y otros paises arabes y del norte de África demuestran con tristeza que la democracia y el poder de los ciudadanos para si mismos, siempre se paga con un precio, pero que ese precio se paga cuando los despotas, dictadores y demas rateros de todo pelaje llegan al limite en la succion de la sangre del pueblo.
En Tunez se esta produciendo el fin de la edad media que todavia tiene atenazados a los pueblos musulmanes. Solo queda apoyarlos de todo corazon, pues lograran la democracia por si mismos, unica forma de tenerla.
España es un ejemplo de que la democracia no es gratis. Aqui se logro evitar derramamiento de sangre a la muerte del dictador gallego, pero a cambio de una parodia de democracia bipartidista en la que lograron sus objetivos los elementos del regimen fascista. Cedemos un poco de poder hoy, para que nos vuelva a tocar mañana. Asi que, si bien es una alegria haber evitado derramamiento de sangre, es hora de desenmascarar el monumental engaño al que estamos sometidos.
Esperemos que lo de Tunez acabe bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario